Es sabado. Se cumplen seis meses del pago de la casa de mi mamá. Hoy fuimos mi hijo y yo a una junta de su  preparatoria. La maestra a cargo, sin control del evento. Videos de la preparatoria para promover cosas, incluyendo un gimnasio con personas haciendo barra de biceps pero mal hecha.

En la mañana en su preparatoria Creo que vi Tres personas en total, de unas 900, con lo que en Demian de Herman Hesse llaman, la marca. Un joven pelirrojo estudiante, con su gafete, en la fila de la cafetería. Una estudiante sentada en una banca de la cafetería hablando con un novio, pero con algo más. En el caso de la tercera persona, una muchacha harta con el mundo, ropa normal estilo francés a pesar de usar jeans, cabello de color estilo punk, pero fue muy leve.

No se trata de romper el huevo del mundo, no se trata de la sed. Es un modo de mirar. La chica tres no sé si le vi esa sed. Nadie más.

Salgo camino a la ciudad donde está mi esposa, me toca un autobñus de excursión de preparatoria y se van todo el camino cantando El tri, Miguel Mateos, Cafe Tacuba, algo del Tri. En momentos no puedo ocultar una sonrisa.

Y se lo que pasarà cuando vean su primer muerto, cuando la violencia del mundo les llegue de improviso.

El caso es que termina una época.