Sueño del 11 al 12 de julio 2025. Estaba Dulce, una de las analistas de los monolitos, y tenia que ver el asunto de los malos equipos de cómputo que tienen. Yo tenia que llevarme una computadora mía, de las antiguas, de ese lugar, y aunque no era de las de gabinete de titanio, ella no encontraba como encenderla. Así que me me tenia que retetirar con esa computadora por incapacidad de darle ayuda. Si con esa no podía menos con las de titanio.  No tengo idea cuanto pese la computadora de titanio principal que usaba mi esposa, pero es mas pesada que lo que aguantas sus mesas. Esa de plano la habrían tenido que poner en el piso. Y no en el sueño, em la vida real. Sin sentimientos el sueño, mas cosas derivados de eso, pero no era de los sueños en secuencia.

Las dos de la mañana tienen algo de honestidad que el resto del día no posee. Es la hora donde todo está más silenciosos y los vacíos legales sin más evidentes. Mi plan era terminar el paquete de documentación para la dependencia gubernamental, pero como siempre pasa en este negocio, los tiempos de entrega y la realidad procesal rara vez coinciden.

En lugar de hacer la presentación, me dediqué a fortalecer el documento base. Sesenta y ocho páginas de argumentación jurídica que ahora incluyen dos secciones adicionales de sustento. Los anexos probatorios crecieron hasta treinta y siete piezas de evidencia, como un caso que se va construyendo con cada documento que se incorpora.  Realmente usé del documento de Función Publica unos 32, Tres de un OIC y solo dos nuevos. Cada archivo adjunto es una prueba más en el expediente principal.

La dama Margarita actualizó su foto de perfil con una imagen que capturé en febrero durante un evento de trabajo. Hay algo tierno en ver cómo alguien construye su identidad profesional a partir de momentos laborales, como si su imagen/valor personal dependiera exclusivamente de donde trabaja/ambiente laboral…y no le pagan. Más tarde recibí un documento que claramente no era para mi caso, algo relacionado con una baja de la sesión diez. No lo hizo en su momento, que le vaya bien. Publicó otro estado sobre un audio de Gorillaz en TikTok. Una foto de hace unos diez años y difícilmente reconocible. y ahora conozco otro de sus alias.

El flujo de efectivo de este mes incluye nueve mil pesos adicionales no contemplados originalmente. Los ingresos inesperados siempre llegan cuando menos los esperas, como requisitos que aparecen justo cuando creías que el sistema estaba estable. Aunque aprecio la liquidez adicional, nunca he sido del tipo que optimiza exclusivamente por ganancia. El dinero es secundario y es solo otra métrica más en la vida cotidiana pero no me define, ni me preocupa, ni me interesa. Sin embargo se agradece..

Hoy la mayor parte del tiempo la invertí en llenar los vacíos del expediente principal de ayer. Es curioso cómo a veces no te das cuenta de la magnitud real de una conducta delictiva hasta que empiezas a hacer el análisis jurídico completo. Lo que detecté el lunes por la mañana resultó ser un patrón de comportamiento mucho más complejo de lo que pensé inicialmente. Estamos hablando de al menos tres delitos adicionales, todos con mayor gravedad penal.

La parte más interesante es que uno de los colaboradores tiene más riesgo de prisión que el cerebro principal de toda la operación. Es como si el ejecutor tuviera más probabilidades de enfrentar consecuencias que el diseñador del esquema delictivo. Cuando sumas las capacidades intelectuales de todo el grupo involucrado, apenas alcanzan los parámetros mínimos para ejecutar operaciones básicas. Un IQ de 140 repartido entre varios actores no es exactamente lo que llamarías una organización criminal sofisticada. Y tienen plaza en el gobierno.

No soy usuario de servicios religiosos, pero a los nueve días de la muerte de mi hermana, pagué por una misa en una iglesia que hace streaming por redes sociales. Compartí el enlace con mis hermanas de Estados Unidos. Ahí estaban, conectadas desde sus respectivas casas. Me agradecieron el gesto, pero era algo que debía hacer. La última vez que vi a la mayor fue en 1980. Se parece un montón a mi padre y abuela. A la otra hermana restante la vi el año pasado durante una visita a México. Paradójicamente, con quien mantenía más conexiones regulares era justamente con la falleció.

Mañana a las 05:15 debo organizar los índices y estructurar los anexos finales. Si todo funciona según lo planeado, podré salir de la casa las ocho y media y tener el acuse de recibo de la dependencia a las once. Después regreso a trabajar en el sistema php del laboratorio de análisis clínico, y en la tarde tengo planes de ir a ver la nueva versión de Superman en el cine. Tengo curiosidad por ver cómo manejan el personaje de Engineer de Authority en esta versión.

Los días como estos me recuerdan que la vida es básicamente un proceso continuo de exposición a la barbarie. Algunos delitos los encuentras a las dos de la mañana, otros requieren investigación forense, y algunos simplemente tienes que aprender a documentarlos meticulosamente. Lo importante es mantener el expediente sólido mientras integras las lecciones aprendidas en cada nueva pieza de evidencia.

Algo interesante es una idea que se me ocurrió pero pone en ridículo la idea principal con que se justifican esa red de peculado. No puedo entrar en detalles pero la dependencia que recibe el expediente mañana se va a reír mucho antes de enojarse mucho con ellos..

Esto parece que va a ser una serie de temas incluso quizá una categoría en el blog.

A las siete de la mañana ya llevaba despierto dos horas. Dese hace mucho, salvo raras excepciones ya estoy levantado a las 05:15, mis jornadas comienzan antes del amanecer sacando respaldos. Alrededor de las siete cincuenta me contactó la dama Margarita, aparentemente por asuntos laborales aunque pronto se hizo evidente que había algo más. Se notaba su malestar, una tensión que no lograba ocultar completamente. Cuando intenté tranquilizarla con algún comentario casual, su respuesta fue directa: «si supieras». Esas dos palabras cargaban un peso que no necesitaba explicación. Mas adelante puso un estado en whatsapp de «el señor contigo quien contra mi», lo que me indica que tiene problemas. Lo vi dese ayer.

Mientras tanto, yo tenía programada una cita en el Ministerio Público a las once de la mañana, un trámite que esperaba fuera rutinario. El desarrollo fue normal hasta que ocurrieron dos incidentes que cambiarían el tono de la mañana. El personal del MP, como es habitual, mostró cierta actitud evasiva, pero logré establecer comunicación con una agente auxiliar del MP. También estaba presente una defensora u orientadora, mientras que yo fungía como denunciante en el asunto de hoy.

Durante la diligencia se produjo un accidente menor pero revelador. Se rompió un frasco de aromatizante concentrado, contenido en un frasco tipo barniz de uñas, lo que provocó una reacción inmediata en todo el personal presente. Varios estuvieron a punto de desmayarse por la intensidad del olor. Mi reacción fue completamente diferente. Desde pequeño tengo una condición particular con los olores, una especie de anosmia parcial que años atrás me llevó a realizarme estudios médicos. Los resultados mostraron que solo detecto ciertas concentraciones de moléculas, y que mi umbral para registrar olores es excepcionalmente alto. Por ejemplo, no registro el olor a gas doméstico ni el de las aguas residuales de los canales, situaciones que para otros son evidentes.

Sin embargo, tengo compensaciones sensoriales que otros no se dan cuenta. Todos tenemos un nervio llamado Trigémino, que tiene que ver con sensaciones en la cara o piel. Percibo sensaciones a través del nervio trigémino, que se manifiestan como sensaciones en la cara. En el caso del aromatizante concentrado, solo experimenté un ligero picor en la parte alta de la nariz. Mientras los demás no podían acercarse, yo pude agacharme y limpiar el derrame con papel de baño, actuando con normalidad en una situación que había paralizado a los demás.

Este incidente funcionó como un rompehielos inesperado. La conversación derivó hacia mi resistencia al químico, con comentarios irónicos sobre quien necesitaba salir a tomar aire. En ese ambiente más distendido surgió el tema de los nombres peculiares, algo que el personal del MP encontró muy divertido (la agente auxiliar tenía un nombre memorable). Mencioné ejemplos como «Winnie Pu Martínez», un nombre que había visto en documentos años atrás, y el caso de unas gemelas llamadas «Mónica y Rebeca Galindo». La risa fue generalizada cuando se dieron cuenta del juego de palabras involuntario: «Rebe caga lindo», «Moni caga lindo». Claramente, un error de los padres al no considerar cómo sonarían los nombres completos.

Al finalizar el trámite, confirmé lo que ya sabía por experiencia. El Ministerio Público mantiene un trato cordial conmigo, pero su patrón de actuación es muy específico: solo hacen algo cuando tienen las cosas físicamente en sus manos. Los delitos que no involucran elementos presentes o tangibles quedan, para fines prácticos, sin atención. El problema es que algunos generamos evidencia que no es física, sino digital o documental.

De todos modos las otras partes en este caso son déspotas, e incluso sin lo de hoy, las MP les van a hacer ver su suerte, pero además ya me identifican. La próxima ves voy a llevar otro aromatizante como gesto de buena voluntad.

La situación de justicia sobre cosas tangibles crea paradojas notables. Hay oficios como vendedor, cajero, panadero o zapatero que producen algo físico, y aunque también sufren extorsión, tienen cierta protección del sistema. Es extraño que cuando vives del producto de tu mente, aunque tengas buena condición física, la protección legal sea limitada o inexistente. Ciertas cosas no son materiales, entonces se echan la bolita entre dependencias. Me ha tocado presenciar desinterés completo, incluso en casos con muertos o heridos hospitalizados. Por una razón u otra, el sistema de justicia en México es tan inconsistente que resulta surrealista.

Tengo razones prácticas, largas de explicar aquí, que me llevan a tomar medidas en dependencias gubernamentales cuando yo mismo o un cliente enfrentamos cierto tipo de problemas. Por ejemplo, ayer llevé un expediente extenso y la dama Margarita se sorprendió al ver las fotografías (creo que se las pasé a las 08:02) . Lo que ella espera, como muchos, es que la justicia te proteja, pero no es así. El sistema actúa de manera reactiva cuando algo ya pasó (si es que hace algo), y además lo hace de forma ineficiente. O te proteges a ti mismo y creas el marco legal para cumplir la ley, o te van a pasar cosas como el traslado de la carga de la prueba.

Me ha ocurrido que levanto una carpeta de investigación basándome en evidencia parcial que me hace pensar que algo va a suceder, y efectivamente pasa cinco días después. Esa carpeta de investigación me cubre. Es relativamente fácil predecir la desidia, la estupidez y la autodestrucción institucional. Lo que a veces no sabes es el cómo se van a manifestar específicamente.

Lo mismo pasa en sistemas informáticos. Te preparas contra vulnerabilidades conocidas y tienes claras las leyes y los scripts que debes ejecutar. En contabilidad, conoces las fechas de impuestos y las posibles evidencias de falta de probidad. El evento de hoy en el MP fue revelador de qué tan grave es la situación: no tenían la más mínima idea de qué era un CFDI de ingreso y un complemento de pago. Así de grave es el desconocimiento.

Salí del lugar rumbo a casa, pensando en comer algo. Pasé por un lugar de mixiotes. Tengo que volver al Ministerio Público a principios de agosto. No solo la tortuga de Mafalda se llama Burocracia, sino que la justicia en México es una tortuga que se esconde en su caparazón. No es solo lenta, sino que además evita enfrentar los problemas.

Y por otra parte El lunes siete, durante un trámite rutinario, observé evidencia de un delito. No sabía si actuar o no, aunque el artículo 222 del Código Nacional de Procedimientos Penales establece que debes denunciar como obligación. No tenía claro cómo, por qué y cuándo proceder. Pero el martes llegó un correo de otra dependencia con cinco preguntas capciosas, y no me quedó más opción que preparar un documento nuevo que llevaré mañana a una dependencia que supuestamente actúa cuando las demás no lo han hecho, e integrar ahí lo del robo de identidad (que no me afecta a mi pero que yo observé)

Tengo que hacerlo porque hay en medio una usurpación de identidad reciente, y todos los otros puntos representan simplemente evasión activa y tácticas dilatorias. La justicia en México es una buena idea, pero es como lo que comentaba ayer: me pidieron en un lugar «documenta los mecanismos internos que no se cumplieron», como si fuera adivino y fuera a revelarles información confidencial.

Así que estoy a punto de irme a dormir, con un escrito casi final de treinta y nueve páginas. Tengo que integrar mañana las correcciones finales, más juntar aproximadamente veinticinco anexos. Es casi medianoche y mañana me levanto a las dos treinta de la mañana para ponerme a trabajar en eso. El ciclo continúa, pero cada paso documenta algo que alguien, en algún momento, tendrá que reconocer que existe.

Son las 11:37 de la mañana y mi cuerpo apenas registra el cansancio de una noche que técnicamente no existió. Ayer  a las 17:56 recibí un oficio de una autoridad que parecía diseñado específicamente para probar los límites de mi paciencia y mi capacidad de análisis lógico. No era  un documento más en la montaña de papeles que manejo cotidianamente, sino una pieza cuidadosamente construida con tonterías evidentes y cinco trampas lógicas que NO cualquier persona con formación jurídica podría detectar a primera vista. La ironía del asunto es que tuve menos de dos horas para contestar el correo inicial, pero esa respuesta rápida me condenó a pasar toda la noche despierto, trabajando contra el reloj en lo que se convertiría en un maratón jurídico agotador, para elaborar , revisar integrar la nueva documentación requerida.

El documento que terminé elaborando no fue únicamente una respuesta al correo, sino una refutación sistemática y TOTAL de cada una de las cinco trampas lógicas que habían incluido en su oficio. Treinta y nueve hojas de documentación densa que requerían no solo demostrar punto por punto las inconsistencias de su argumentación, sino también mantener un tono profesional mientras descubría delitos evidentes en el mismo documento que me habían enviado. El proceso implicaba validar cada dato, pensar cada argumento, sentir el peso de cada palabra que escribía y manejar cuidadosamente el tono para no caer en la trampa de sonar enojado o peleonero cuando en realidad estaba siendo meticulosamente técnico. Lo que más me llamó la atención fue que se les estaba olvidando manejar el punto más importante de todo el asunto, ese punto X que constituye precisamente el origen de todo el problema que estaban pretendiendo resolver.

En mi respuesta al oficio, hice notar bajo protesta que las formalidades que me exigían eran innecesarias y carecían de sustento legal, recordándoles que de ellos depende el peso de la prueba y no al revés. Su oficio omitía deliberadamente el origen de todo el problema, ese punto X que constituye la médula del asunto y que ellos conocen perfectamente bien. Es increíble que me pidan demostrar qué mecanismo interno de control no siguieron, cuando son ellos los que conocen sus propios mecanismos y además no existe ninguno establecido formalmente. Escribir eso fue precisamente evidenciar el traslado indebido del peso de la prueba que estaban intentando realizar.

La complejidad del trabajo no terminaba con la refutación del oficio. Del manejo original de 56 expedientes, tuve que releer 20 completamente, condensar 32 en un documento de 49 páginas que a su vez representaba la síntesis de 249 hojas originales, y volver a enviar todo porque habían extraviado el anterior. Además, fue necesario crear un nuevo documento de 19 hojas sobre un delito que afirmaban no haber recibido, obligándome a entregar otro resumen de una documentación que ya había sido presentada anteriormente. Como si fuera poco, siguiendo la sugerencia de reportar las irregularidades del oficio ante la Función Pública, tuve que integrar ese acuse como documento 2 en un nuevo expediente que requería su propia estructura y argumentación. Basicamente el documento base nuevo eran 39 hojas centrales, 49 del condensado, 19 del delito reformulado y 22 de otro de los anexos.

A las 11:55 salí de casa con una misión clara pero pesada: entregar 11 hojas con dos copias antes de las tres de la tarde, y aproximadamente 250 hojas con tres copias antes de las cinco. El cálculo parecía simple en papel, pero la realidad de moverse por una ciudad como esta, con sus distancias, su tráfico y sus imprevistos, convertía entrega en una carrera contra el tiempo. La logística requería no solo planificar las rutas más eficientes, sino también calcular los tiempos de impresión, los costos de transporte y la posibilidad de que surgieran complicaciones de último minuto. Luego esperar a que me atendieran

El día transcurrió en una secuencia borrosa de movimientos calculados. Logré entregar el primer documento a las 13:30, lo cual me daba cierta tranquilidad para concentrarme en la segunda entrega. El segundo documento lo entregué a las 16:40, apenas una hora y cinco minutos antes del plazo límite de las 17:45. Al regresar a casa a las 17:56, me di cuenta de que había subestimado el volumen final: cada juego resultó ser de 450 hojas, no las 250 que había calculado inicialmente. La diferencia representaba no solo más trabajo de impresión y más peso que cargar, sino también más dinero invertido en un proceso que cada vez me parece más absurdo.

Como no había tiempo para una comida formal, mi alimentación del día consistió en un burro preparado comprado de manera apresurada y unos hotdogs que logré conseguir entre traslados. Considerando las impresiones y los taxis, el gasto del día alcanzó entre 700 y 800 pesos, una inversión que para mi es pequeña para un trabajo que debería ser rutinario pero que se complica por la falta de organización y la tendencia a trasladar responsabilidades que no corresponden. Mi tipo de trabajo me exige documentar meticulosamente cada paso y prepararme para lo inesperado, aunque después la gente sale con una estupidez y una actitud irracional que es verdaderamente increíble.

Mientras procesaba todo esto, no pude evitar pensar en la situación de la Dama Margarita, quien publicó tres estados en redes sociales que revelaban más de lo que probablemente pretendía. Uno sobre el cumpleaños fallido al que no fui, donde quedó claro que no había ninguna otra analista presente y que se había aislado sola. Otro sobre su hijo, aparentemente del año pasado, donde se veía claramente enferma. Y un tercero del evento del 19 de mayo que evidenciaba una necesidad de pertenencia que resulta casi palpable. No menciono esto por criticarla, sino porque existe otra analista que además tiene la misma edad con apenas dos meses de diferencia pero que está en mejor condición física y emocional.

Quizá el problema de la Dama Margarita es que se exige demasiado y al no recibir el pago correspondiente empieza a reducir gastos en alimentación, iniciando un proceso de canibalización física que afecta su rendimiento general. Pero no es solo eso, hay un componente más profundo que podría describirse como suicidio emocional, una forma de autodestrucción que va más allá de las limitaciones económicas y que afecta su capacidad para mantener relaciones profesionales saludables. Es un patrón que he observado en varios colegas que trabajan en condiciones similares y que me hace reflexionar sobre la sostenibilidad de este tipo de trabajo.

Al final del día, sigo resolviendo problemas porque es lo que hago y es lo que sé hacer bien. Mañana tengo que ir al Ministerio Público y ya está todo listo para esa cita. Es hora de descansar, aunque en realidad no me siento realmente cansado después de todo lo que hice hoy. Sin embargo, la experiencia me ha enseñado que es mejor llegar fresco a las citas importantes, especialmente cuando involucran instituciones que pueden ser tan impredecibles como las que he enfrentado estos días. Dormir una hora y media máximo porque era obligatorio me recordó que a veces el cuerpo y la mente pueden funcionar en modos de emergencia que no son sostenibles a largo plazo, pero que son necesarios cuando las circunstancias lo exigen.

Ya pasó del mediodía y por el momento terminé con lo del cliente de Diciembre, que es como contratista de un contratista para gobierno. Como hay varios detalles de confidencialidad y hemos hecho varios proyectos, me refiero a él como el cliente de Diciembre. Básicamente me encargaron una cosa pesadísima en diciembre 2020 en pleno COVID, que fue convertir una hoja de cálculo cifrada a un sistema PHP complejo, en menos de 20 días. Y sí lo acabé. Por eso cobré 50 mil, y por lo demás lo hemos manejado a veces por proyecto o cuando son ajustes pequeños, por hora. Un ingreso fácil para hacer cuentas y «bueno» de un profesional en México, que no cometa ilícitos, lo calculo entre 1000 y 2000 USD al mes. Así que cuando son cosas sencillas, pongo un cronómetro y hago un cálculo estimado, que al tipo de cambio actual es de 150 a 300 pesos la hora. De momento no estoy en tiempo completo para ningún cliente, solo en disponibilidad.

Desde el último pago recibido de ese cliente, hay un valor previo de 3000 que me debe del último reset, y entre ayer y hoy han sido 5:35:05. Esto no parece mucho, pero cosas como «Cámbiame el logo por favor», «no se ve», dale ctrl F5, ah ya, y contestar en WhatsApp van sumando. En este caso un experimento que no viene al caso sobre un problema diferente me hizo perder dos horas y la parametrización, ajustes y revisión de reglas fueron 3 horas más. En segundo plano saqué los últimos Caracales de Konora en Eve Online, y me reí mucho con las últimas novedades de los monolitos. Por ejemplo, en este momento usé 10 minutos en grabar un audio y WhatsApp con el cliente diciembre. Básicamente se extendieron y ahora ya voy 6:38:50. Lo que significa que en contestarle, escribir un documento de cinco hojas sobre entornos air-gapped y requisitos e instalación usé otra hora.

Pero esto no es exactamente freelance, o mejor dicho no me dedico a freelance. Con el cliente problemático es una iguala por estar disponible, que es más de lo que recibía en el cliente de los monolitos, que es tiempo completo, y entre las dos cosas el valor era por ejemplo más de tres veces lo que gana la dama Margarita, o cuatro veces más de lo que gana mi hija en su trabajo. Por lo mismo, sin monolitos, no soy freelance sino tengo un cliente fijo sin problemas, el de la iguala, y varias cosas que salen pero no me presionan ni las busco. Cliente es el que paga.

En cuanto a la mañana, me buscó la Dama Margarita. Otros errores simples pero fatales del cliente. A ella le tocó todo este año revisar el cuadro, y aunque me buscó ayer en la noche con ayuda que le pude dar en lo que cabe, hoy descubrimos que le dieron todo mal, mezclando cosas de aquí y allá, y me da a entender por lo que conozco de la operación que hicieron una exportación de base de datos y no el módulo de mi sistema. Y como las claves son seguras, y no tienen entorno gráfico, probablemente ni siquiera entenderían cómo se codifica el password. En resumen, hay muchos detalles allí que hacen pensar que eso va a ser un mega desastre y además no se ve muy contenta, no conmigo. Como dato adicional, van a tener que sincronizar 10 archivos de Excel, y si dos personas están en remoto, menos.

Así que la diferencia entre mi modo de trabajar y el de los aficionados, es que en la medida de lo posible documento cuando hay tiempo. En los monolitos hay cosas que no están documentadas, como pasa a veces, pero era por la carga de trabajo, y porque al mismo tiempo venía realizando operaciones de soporte para no detener la operación. Los cambios y mejoras que debían hacerse ya están documentados, el server, la red o WAF no lo permitía, y por último, apenas había incorporado herramientas que estuvieron en pruebas durante meses como la generación de cuadros. Y no puedes documentar lo que acabas de liberar a producción cuando al mismo tiempo no te pagan. Dato curioso que cinco o seis funcionalidades necesarias para ese puesto, están en el código, las usaba a cada rato, y el código se explica y los logs de acceso también, pero hay cosas que no pueden hacer, no solo de cierres como lo que pasó hoy a la dama Margarita, sino del día a día. Lo único que uno puede decir es, y ¿qué esperaban? Si ponen a alguien que piensa que es simple levantar un cpanel con PHP 5.6 hoy, y que se tomó en serio lo de servidores en frontera, solo puedo desearles buena suerte y reírme mucho.

Hoy Se cumple un mes de la salida de los monolitos, y hace un momento me buscó la dama Margarita. La persona que quedó en mi lugar por ahora ya sabemos que tiene un nivel bajísimo, y por lo que entiendo no hizo las fórmulas de Excel necesarias para cuadrar / verificar, y mucho menos las de porcentajes Eso me hace pensar que aunque haya  esa persona encontrado como generar el resumen o cuadro desde mi sistema, no va a poder hacer lo que sigue que es más complicado. Ella no me dijo si el reemplazo le exportó los renglones también, a final de cuentas no importa pero esos renglones son necesarios para el reporte trimestral.

Los Rosacruces comentan un principio que aparece en Zanoni, cuando en un momento dado de la novela de Bulwer Lytton se dice que quien echa agua en un manantial turbio no hace más que ensuciar el agua. No puedes limpiar el lodo de un pozo de esa manera. En la empresa de comunicaciones vía satélite en 2010 aproximadamente, mi jefa inmediata era una contadora que captamos mintiendo. Le constaba al socio  que me contrató, y tenía que ver con una instrucción directa sobre comunicarse con candidatos rechazados de sistemas. El problema es que su trabajo era coordinar ciertas cosas de certificación de factura electrónica, para controles terrestres vía carta porte. No puedes tener a alguien mentiroso como contador o abogado, es suicida y mucho más para una empresa dedicada a certificación para volverse PAC que involucraba seguimiento vía satélite de valores y vehículos.

El problema en ese caso derivó en que me retiré, igual que ahora, y me pidieron que regresara. Eso debió ser el 17 de septiembre 2010. Metieron a una persona para llevarse el crédito de mi trabajo en noviembre y sí entregué todo el sistema, pero la certificación nunca se pudo hacer y el tipo que entró era el de la guitarra eléctrica. Así que él lo que hizo fue no solo estropear la certificación, sino causar problemas. Cuando me dijeron que querían que entrara a 300 máquinas virtuales de las que perdieron la contraseña, fue el inicio, además querían que hiciera una interfaz con los sistemas de los clientes lo quisieran o no, lo que no solamente es imposible, sino poco ético. Salí de allí más o menos en marzo de 2012, cinco días después que se dieron cuenta de varias cosas, lo de hackear máquinas virtuales de clientes porque se les olvidó a ellos (la empresa de vía satélite) la contraseña era una de muchas.

Pero en ese año y medio no había más que hacer. Antes de colapsaran, me tocó ver varios errores simples pero fatales. Como pedirme entre las pocas cosas de mi sistema, que ya estaban manejando otros, que le quitara la integridad referencial a un sistema de factura electrónica. Nuestro producto en eso era vender el histórico. Ese año y medio me dediqué teóricamente a hacer lo que se llaman cartas porte, un documento que dice que está yendo en carretera, y addendas de factura electrónica de reclamaciones de seguros. Hubo uno o dos proyectos que se hicieron a medias y abandonaron, como uno completo de recursos humanos y otro para hacer una interfaz con Volkswagen.

Mira que pequeño es el mundo porque esas mismas personas fueron después en esas mismas fechas a un evento de coches de lujo, coordinado desde el punto de vista de sistemas por el que era jefe de sistemas en la fábrica de galletas antes que llegara yo, y yo hice todo el sistema de QR para controlar asistencia y entregas de Kits de cortesia y pagos de Paypal por QR y le pude avisar a tiempo a mi contacto. Estos idiotas, porque no hay otra forma de decirlo, también querían por parte de la Volkswagen que les dieran 30 pases dobles con hamburguesas en un evento de 200 personas donde 150 eran dueños de camionetas de muy alta gama.

A final de cuentas cuando me fui, me dieron la peor liquidación que he recibido, literalmente no llegó ni a dos mil pesos. Lo acepté pero dije que ya no daba nada de soporte. En ese caso fueron tres años, por un esquema mixto de mis empresas y honorarios asimilados a salarios. Ese lugar cerró menos de un año después y fue absorbido por la parte de lo que le hice lo que podríamos llamar impresora digital en Visual Basic. Pero lo que me recuerda mucho es el caso actual, que es uno de los dos únicos casos que me han pedido hacer algo ilegal y esa fue la razón de mi salida. En el caso de la empresa de satélites, mi salida previa que no me dejaron hacer fue porque no podía trabajar con una persona que estaba mal en contabilidad y mentía, en una empresa dedicada a certificación para volverse PAC.

El otro caso fue allá por el año 2001. Vendí la empresa simple que hice con Eduardo, y la persona a la que se la vendí me preguntó cuánto tiempo me tardaba en hacer un sistema de estadísticas para ISO 9000. Pero como eran Pareto, espina y la prueba triangular que mucha gente no conoce, además de unas cinco a diez gráficas mas dije que en tres meses. Él se comprometió a entregarlo en tres semanas y vendió licencias de SQL Server 2000 en paquetes de 5 que ya no estaban en el mercado, y me avisó tan tarde que ya no había forma de conseguirlas. Y quería que mintiera por él.

Estaba en un modo de trabajo mixto; en la oficina por el lado de Reforma, y en las instalaciones del cliente por Indios Verdes, fábrica con comedor. Y recuerdo que les dije lo que estaba pasando, me comunicaron con su gerente de sistemas. Y luego llegó el que me compró la empresa y esperaba que mintiera por él. La empresa ya no era mía. Dijo algo que se echó solo la soga al cuello figuradamente hablando, y solo asintieron las personas del cliente. Luego me enteré que sí era cierto que les dijo en tres semanas. Y yo lo que hice fue trabajar muy duro esas tres semanas con Pareto espina y otras simples para su certificación de ISO 9000. Lo hice gratis, era lo correcto. Pero solo saqué de eso tres semanas de comida de comedor de la empresa que no estaba mal. No tenía entonces siquiera 30 años.

Hubo otro caso a finales del 2000 en un lugar donde estuve de noviembre 2000 a febrero 2001. En ese era algo para un hotel de super lujo. Había que hacer dos sistemas, un módulo en Visual Basic con ADOX para control de consumo de minibares y entradas y salidas del hotel y el otro era algo en handheld. Ahora que lo pienso esperaban que yo mintiera dando una fecha sobre handheld. En su momento dije que no me habían dado como subir datos al handheld. Aunque ya había hecho cosas SCADA, sé lo suficiente para decirles en su momento que no podía decir fechas. Finalmente ese sistema la parte de Visual Basic la hice en menos de una semana bajo VB5 con VB6, instalador de VB5 con controles de VB6, y me acuerdo que hice todo para Access sin tener Access. Lo extraño es que de todos los lugares en que he trabajado, es el único donde aprendí algo. Validación por esquemas de Yourdon que hizo un antecesor. Finalmente años después me enteré que ese socio los demandó por lo de handhelds. De ahí me fui por falta de pago, y recuerdo muy bien que el negocio de la venta de mi pequeña empresa certificada salió en el contexto de problemas del 2001, cuando el lote de autos usados que era cliente me preguntaron cómo se certificaba uno en ese estándar, para un amigo. Y de ahí salió vender la empresa que el único bien que tenía era justamente esas certificaciones y mi cerebro, y la venta no me cayó mal. Es de lo que viví ese año, que fue en el que muchos clientes pequeños desaparecieron y lo que estaba de moda era ASP.

Así que aunque la dama Margarita me pide apoyo hace una hora, y me da pena, sé que lo más seguro es que no le paguen porque el presupuesto es anual, y a estas alturas no pueden justificar darle 32 mil mensuales por los seis meses anteriores (creo que gana 16). Lo más seguro es que le ofrezcan solo pago de unos meses. Por cuestiones familiares, de la familia de mi esposa, supe que hicieron algo similar hace menos de diez días a una persona de honorarios que estaba en otra dependencia de la misma institución, y le quisieron bajar el pago en un 25%. El resultado es que esos conocidos y yo mismo, nos quitamos en medio. Ahora estoy tomando mis medidas porque lo que me pidieron hacer debe reportarse.

No pude avanzar gran cosa hoy con el cliente del proyecto de diciembre; es un proyecto/cliente de hace cinco años. Sin embargo, aproveché bien el tiempo yendo al ministerio público. Las dos carpetas de investigación ya están formalizadas, y ahora viene lo demás. Y en este caso para variar parte del problema viene que no leyeron bien lo que puse, en la primera hoja. «Favor de canalizar a dependencia federal X»  y así que me encuentro tratando con dos ministerios públicos de barrio, que no es malo en sí, pero no es lo más directo. En este caso no se trata de limpiar, sino simplemente no ensuciarse, y si no hubiera tomado las medidas que he tomado, siempre existiría el riesgo que cuando les estalle me traten de echar la culpa. Y aquí están afectando literalmente a miles de personas.

Como les explicaba hace un tiempo a los de servicio social,  la integridad es estrategia de supervivencia profesional, no solo es un principio moral.

 

Es una tarde de miércoles, mitad de semana, y me encuentro volando en el espacio llevando uno de los últimos caracals en Eve Online, escribiendo esto y justamente acabando de preparar documentación para ir mañana al ministerio público. Lo que llevo es lo que me pidió la segunda ministerio público, para el citatorio de hoy en ocho, pero lo llevo por si me lo pide también la agente de la otra averiguación. Son dos casos relacionados.

Mientras escribo, me comentan que una de mis medias hermanas en USA está en un asilo, tiene tres hijos y dos hermanas directas allá, y que probablemente no sobreviva hoy. Me hace acordarme de cuando ella me localizó por internet en el año 2000. Ahora debe tener unos 67 y serios problemas de salud. No es mala persona. Sin embargo, en una de sus tantas visitas, en 2020, me dio COVID, no fue ella pero seguramente fue en el restaurante al que fuimos, a pesar de todas las precauciones. En eventos como este de vida o muerte me acuerdo de la familia del lado paterno y cómo me distancié de ellos por causa de fuerza mayor en 2005. Sigo hablando bien con ellos, pero no es por la muerte de parientes que no hablamos, sino que hay cosas que son de diferentes épocas. Me llama la atención también que de la reunión de todos los primos Orozco, que éramos unos 35, soy uno de los dos únicos que no fue y la verdad no me acuerdo del otro que era. Yo estaba fuera del país y me enteré una semana después. Mi padre me dijo que uno de mis tíos pagó el avión de todos a la reunión. Según mis cálculos mi padre murió ese año o el siguiente.

Del lado de mi mamá tengo poco contacto por haberme criado con mi papá. No hablo demasiado, no hay problema con nadie, y varios se apartaron por sus conflictos internos. Y una que se trató de pasar de lista con mi mamá acabó con averiguación previa cuando me enteré. Al final mi madre decidió que como soy el único que me preocupé por ella, después de la muerte de mi tío Héctor, ella misma cortó todo el trato menos con tres de mis primas. Eso sí, muchas alumnas de sus clases de pintura y de la época que manejó recursos humanos en diversas empresas medianas en el interior del país.

Del lado de mi padre la muerte de dos o tres personas empezando por mi abuela deshizo el núcleo familiar firme que hubo. Me acuerdo lo que era salir de aquí del DF a las 5 de la mañana y llegar a las 11:30 a casa de mi abuela en Guadalajara. O quedarme meses con mi abuela y una tía mientras mi padre estaba de viaje de trabajo en Europa y USA. Muchos años fueron así. Y supe que mi abuela y tía le dijeron a mi papá, cómo lo vas a criar solo, y sí lo hizo. Su trabajo se lo permitía. Así que aunque en mi vida solo vi a mis padres juntos cinco minutos, una noche en Cuernavaca, no me di cuenta hasta mediados de los 80, entre los 13 y 15, que muchos niños se criaban con papá y mamá. Y eso que trataba seguido con las familias de mis primos de Guadalajara y de México, simplemente nunca me di cuenta por el modo en que lo manejó mi papá.

Mi madre quiso que la cremaran con ropa cómoda. Con mi padre era obligatorio uno de sus trajes finos. Creo que el que se usó era de tela de Inglaterra, que le regaló una persona interesada en la música clásica. Y me acuerdo que ese traje costó trabajo encontrar quién lo hiciera, porque no querían meterse con la tela de lo cara que era. Los dos tuvieron coro, en mi padre en su funeral fueron cantantes de ópera, compañeras de trabajo, en el caso de mi madre de la iglesia del México rural. No sé si yo tendré coro, pero cuando muera lo importante de mí no estará en mi cuerpo.

Trabajé unas dos o tres horas hoy con lo del cliente diciembre, sí era una reconfiguración completa. Fui a la peluquería pero estaba cerrada, iré mañana. Y llevo unas dos horas preparando papeles del ministerio público. No sé si mi hermana muera hoy mismo, que es lo más probable. Ir a USA de momento no es buena idea entre otras cosas porque mi hija está saliendo tarde del trabajo, y por otra que con el relajo que se traen con los mexicanos de momento no tiene caso. Por lo menos sé que están allá sus hijos y nuestras hermanas.

En mi caso en una semana a partir de ahora sabré más datos de lo que suceda con el cliente de los módulos, y de las dos averiguaciones previas. Pero en cuanto a mis hijos no pienso demasiado en ellos. Con mi hijo es mejor no tener contacto, cosa que ya se dio cuenta mi hija viva, y en realidad no importa quiénes son tus hijos porque puede darte gusto que hagan algo pero sentirte orgulloso de sus logros es como estar orgulloso que ganó un equipo de fútbol. He hecho lo posible para ayudar siempre, pero como diría mi padre, ser árbol de frutos y no de leña.

Veo varios posibles futuros para mí en este momento a cinco, diez y veinte años. De momento por todo lo que está pasando veo un poco inciertos los próximos tres meses, y los planes de contingencia hacen que ciertas cosas sean solo una molestia menor. El fin de año probablemente me va a agarrar trabajando y haciendo servicio social al mismo tiempo. Tengo al mismo tiempo pendientes por hacer que de momento no puedo ni debo hacer, para no distraerme, en cuanto a personas que debo ver y comidas sociales pendientes. Simplemente es mejor de momento esperar. Lo que está pasando de momento no es siquiera una batalla, es una obra de ver a las personas darse en la torre de una manera u otra. El caso de las averiguaciones previas que he iniciado, ni en este caso ni en las de la secta o de la madre de mis hijos o las levantadas para clientes o mis propias empresas, hay algún compromiso emocional. Ir a ciertos lugares debe ser siempre con los ojos abiertos y sin emociones; no puedes llegar a ciertos lugares con un corazón limpio sin capa protectora, solo se ensucia. Así que de momento, hasta que llegue el momento de dejar que las cosas sean, tengo que tratar de proteger lo que puedo proteger, estar tranquilo y de buen ánimo.

A punto de dejar de escribir suena la alarma, es hora de cerrar el cofre de las galletas en el monolito en que ya no estoy, y el cofre de galletas está aquí.

edit: A las 17:55 me confirman que falleció. Descanse en paz

 

Es martes y ya hice el ajuste del cliente de las gasolineras, que como casi todos los martes requiere su atención. Al menos el cliente problemático tiene un día tranquilo, aunque los monolitos siguen siendo un completo desastre. No estoy ahí pero me enteré que cayó el número dos, y pues sí, era de esperarse. Hay varias razones extras de las que no vale la pena hablar mucho, pero los días primero de mes son ideales para ese tipo de situaciones.

Ayer me enteré que mi exjefa trató de hacer un intercambio de pan dulce y la verdad se veía muerta de hambre. Solo cinco de su equipo anterior se animaron, los demás no quisieron participar (5 de 26 da una idea del apoyo que tiene). El área está hecha pinole y no hace ni un mes que salí de ahí. Es impresionante cómo se desmorona todo tan rápido cuando las cosas no están bien estructuradas desde el principio.

Hace un rato recibí un manual muy complicado del cliente diciembre cambiando todas las reglas, como si fuera una reconfiguración completa del sistema. Eso es un desastre total. La base de datos y los parámetros no son nada simples, y en propiedad es una cosa muy diferente parametrizar un párrafo o dos, y otra muy diferente hacer cambios desde cero como si fuera un sistema completamente nuevo. Las reglas son pesadas y creo que también va a cambiar toda la lógica del proceso.

Mis contactos personales siguen funcionando bien, hoy recibí información de las dos primas. Tengo que ir a la peluquería mañana porque el jueves tengo que ver qué pasó con una del ministerio público. En lo personal estoy medianamente desencantado del sistema de justicia que tiene México y espero que el cambio del sistema judicial realmente funcione. Las veces que más caso me hicieron fue cuando hice algunas cosas en defensa propia. Denuncias un delito y muchas veces no les interesa aunque las pruebas sean obvias.

Hace unos años, por ejemplo, antes de la entrada de AMLO, el día anterior el presidente Peña Nieto dio orden, según me dijeron, de cerrar las carpetas que no fueran de crímenes mayores. Me lo dijeron en dos lugares diferentes. Lo peor del caso es que en una de ellas la madre de mis hijos hubiera ido a la cárcel en USA o aquí mismo por varios años, pero simplemente lo cerraron basándose en condición vulnerable. Si con pruebas ideales hacen eso, pues ya te imaginas.

El problema es que la justicia por propia mano no es algo que deba hacerse. Si estás en la calle y un imbécil te saca un cuchillo o te tira un golpe, puedes aplicar autodefensa, pero en crímenes no violentos algo está muy mal aquí, y después de los juicios orales de hace unos años, salen consideraciones adicionales. De momento tengo 53 años y me he encontrado con jueces que pasaron con 8.2 en el Estado de México, y con ministerios públicos de 7.2, tanto ahí como en Oaxaca. Pero uno tiene que hacer las cosas de la forma correcta hasta que alguien busque violencia. La pregunta es por qué. Dirían en la película La Noche del Cometa que el peso de la civilización recae sobre nosotros.

Hace unos años leí las estadísticas de Bernoulli y su familia, y cómo llegaron a una estadística o fórmula para predecir probabilidades de vida. En México anda por los 70s, eso significa que en circunstancias estándar puedo vivir otros 20 años sin mucho problema. Estoy seguro que ya pasé la mitad de mi vida a menos que se hagan cambios muy revolucionarios en medicina, pero la mayoría de las personas están en decadencia total desde que pasan los 30.

En circunstancias como esta, el no soñar es una característica que me ayuda; mi inconsciente no necesita procesarlo o decirme algo. Eso sí, cuando sonó a las 5:15 de la mañana el despertador hoy, hice los respaldos y me volví a acostar. Realmente este mes desde que salí de los monolitos no había descansado. Y sin embargo, cuando voy al baño vienen mis tres perritas y el perro de mi hija. De momento tengo que estar comunicado y no los saco a pasear. El perro de ella es cruza de pastor inglés con san bernardo parece, y se ve que va a ser grande. Es cariñoso y no demasiado atrabancado, porque es un cachorro y todavia no tiene un año.

Toda esta semana mi hija sale tarde de trabajar así que tengo que ir por ella. Supongo que al igual que ayer, después de ver la cena, a dormir. Aunque no he tomado siestas sí he tenido un ciclo de sueño más grande esta semana que pasó. Mi ciclo normal suele ser de seis horas máximo, y las dos primeras semanas al salir de los monolitos, por todo lo que había que hacer, dormí seis horas pero a ratos. De momento pues esta semana creo que he dormido dos o tres días ocho horas, lo cual es súper raro. El hipertiroidismo controlado ha hecho que casi siempre seis horas sea normal desde antes de los veinte.

Entonces, me encuentro en una etapa de estar como con un pollo en el horno viendo por la ventana del horno, esperando a que pueda abrirlo, tomar el pollo y repartirlo. Con lo del cliente Diciembre de mañana voy a estar ocupado, y como a ese cliente le cobro por hora, probablemente me enfoque en ver si termino la parametrización y configuración desde cero.

Para los que no entiendan la referencia. hubo una editorial llamada Novedades Editores. Parte del desastre de la agencia de publicidad que tuve que arreglar por unos cambios en 1994.

Pero ya en otro asunto, em la tarde me buscó la dama de los emojis con una historia interesante y actué en consecuencia. Mañana me entero de más. Hago bien en seguir en contacto con ella.

Ya acabó medio año. Decidí también que despues de este gato no tengo otro y ya le avisé a mi hija.  Prefiero mil veces a los perros que a los gatos, aqui es derivado de las acciones de mi hija, pero no voy a poner a eta gaita enriesgo pero tampoco es algo que piense vivir indefinidamente.

Por mientras no hay problema. Es parte de la familia.

Mi hija esta trabajando ne un lugar normal pero no es zona para que alga una dama de 18 asi que use dos horas, una de ida y otra de vuelta en ir por ella.

Tengo que descansar. dia pesado en actividad mental.

 

Son las nueve de la mañana de un lunes cualquiera, y como siempre a esta hora, ya tengo corriendo los respaldos de servidores, por lo monolitos no estoy respaldando dos y esos en especial no son de los que se respaldan fácilmente. que les sea leve. En segundo plano, además del respaldo necesario para generar un reporte de otro cliente, tengo un piloto de Eve Online evacuando naves en automático. Hace un mes se me ocurrió comprar setenta y cinco Caracals en un lugar peligroso como accesorio de lo que realmente quería comprar, y desde entonces he estado sacando las naves poco a poco. Me faltan dieciocho por evacuar y otras quince que estoy llevando a vender, pero lo hago en segundo plano. De momento no tengo nada formal que exija un compromiso o mi atención completa. Si estuviera en teletrabajo, estaría en atención completa, pero esa es precisamente la diferencia.

Mientras tanto, me encuentro pensando en algo que he observado últimamente. Hay mucha información que las personas ponen en sus estados de WhatsApp, y se puede ver cuando están desesperados o perdidos en el espacio. A veces se ve dolor, pero por lo general, algo que no está bien. El mal, en muchos aspectos, es lo que no debe estar en un lugar. Los dos ejemplos clásicos son claros: un tornillo que cae de un piso treinta mata a alguien, y un moco en el dedo no es necesariamente el mal, pero no se ve bonito. Así que me encuentro a veces viendo estados de WhatsApp, y como la semana pasada con el de una analista que decía «I love monolito» , pues, si no le pagan y estaba por irse a teletrabajo, eso es masoquismo puro (y podemos decirle mas feo).

Por eso, cuando alguien publica videos de paisajes o de literalmente los tres idiomas de Duolingo que está haciendo, en horas de trabajo, sé que no va a estar trabajando en realidad. Otros son intentos de curitas en el corazón, o incluso publicidad disfrazada. Pensando en mis treinta y cinco usuarios principales de los monolitos, varios de ellos, como yo, no publican estados. Otros contactos relacionados con los mismos, de vez en cuando sí. Entre los habituales hay tres amas de casa responsables de sucursal que publican fotos de sus hijos, pero casi siempre fuera de horario de trabajo. Lo más común son fotos de cumpleaños. Que yo sepa, nunca he publicado un estado de WhatsApp.

Ahora bien, a veces te sorprendes. De los de teletrabajo que sigo, alguien puso cinco fotos de una carrera. La acción digital es diferente a la real, pero se complementan. Por ejemplo, ocasionalmente escribo esto con un cliente, pero siempre que no sean horarios de entrada y salida. Si no tienes checador ni compromiso moral de estar ciertas horas está bien, y por lo general lo publico después, guardándolo en el iPad o en el mismo celular. Incluso creo que he escrito en el metro.

Económicamente no estoy mal. Sí, me deben cinco meses de sueldo que probablemente me paguen la próxima semana por cinco o seis vías diferentes. Considerando el otro ingreso que tengo seguro, puedo seguir así hasta que me muera, y sin limitar gastos más o menos año y medio. Los cinco meses son parte del problema, no el problema en sí. Mi hija ya está trabajando, ese dinero no me interesa en lo más mínimo aunque se va a hacer cargo de los gastos de su gatita, pero hay una idea más importante aquí.

Las cosas a veces no deben ni pueden ser perfectas, pero hacer demasiados errores o permisivismo o autocomplacencias te mata. Por ejemplo, una de las cosas más complicadas cuando haces documentación, sean reportes ejecutivos, documentos legales para gobierno, o manuales de computadora, es mantener el tono adecuado, y sí, cada quien tiene su forma de escribir. En la película de Pixar «Valiente», hay una arquera que se llama Mérida, de pelo rojo (buen nombre para una cazadora en Warcraft con mascota oso), pero uno de los mejores momentos de la película es cuando le dice al papá, refiriéndose a uno de los pretendientes, «ternurita».

Las inteligencias artificiales LLM tienen varios problemas que no escribiré aquí, y al igual que ciertas personas son demasiado serviciales y a veces hacen correcciones antes que lo pidas. Por ejemplo, cuando evalúo código o manuales para ver si son comprensibles, la IA quiere reestructurar a un modo que sea más legible para ella, la LLM, pero los documentos legales y los manuales se hacen con un público y tono en mente, no deben ser demasiado perfectos. Por ejemplo, le dije a mi hija ayer que entraba temprano, que llevara dinero para el taxi, ella dijo que no, que se qué, que se podía levantar más tarde, y tuvo que tomar taxi, y yo tenía razón porque conozco los cinco imprevistos de trabajar en la mañana de domingo. Es un mensaje dirigido al público objetivo.

Entonces me encuentro aquí, pensando, esperando el transcurso del tiempo porque hacer un proceso prematuro es como sacar un pollo del horno antes que esté cocido, o quitar un USB mientras se copian archivos. Y las cosas no deben ser demasiado perfectas. No me refiero a que esté mal hacer las cosas imperfectas. Lo que quiero decir es que así como hay una tasa máxima de niños que se permite que se les caigan a las enfermeras de pediatría (cero), hay procesos que tratar de mejorar te meten en problemas. Una vez salió el pastel del horno, es bueno o no lo es pero la perfección es relativa. No sigues corriendo después que llegaste a la meta, y no sigues nadando después de llegar a la pared. Así que el problema es que la mayoría de las personas no tienen metas, no tienen principios ni valores y se conforman con irla pasando.

Mi padre era un hombre atractivo físicamente, y su novia más representativa también. Literalmente vi como se les abrían puertas a los dos por eso, y los problemas que llevaban. Incluso en mi juventud nunca tuve eso, pero sí inteligencia, y fuerza. Algo de salvajismo contenido. Mi padre era inteligente, y le llegó a decir a la madre de mis hijos que yo era más inteligente que él. No importa a final de cuentas. La proporción es parecida, y los valores parecidos también. Observador desde joven, no quise cometer los mismos errores de mi padre. El confiaba mucho en su fuerza física , incluso a los 65. Pero preferí apostar por la mente y de todos modos tener el cuerpo sano.

Muchas personas basan su vida en fuerza física o belleza, en inglés le llaman «pretty privilege», y yo he tratado de no basar mi vida en eso, sino en honor, confiabilidad y el uso adecuado del cerebro. Algo que leí hace poco que me hizo pensar, era de los niveles de oxígeno en el aire. Sí, son diferentes los cielos y los aires de México DF contra la playa u otro lugar. Pero, al mismo tiempo, necesitamos otras cosas del aire. No solo oxígeno. Respirar solamente oxígeno te mata. El ozono que recuerde tiene tres átomos de oxígeno, y hay cierta imperfección que incluso necesita la naturaleza.

El problema es que si estás en horas de trabajo, puedes tener sí contactos personales eventuales por plática de watercooler, donde sabes qué está pasando y a quién estás viendo, pero ciertos estados, no. Hay una antigua analista de hace dos años que cometía muchos errores y pone diariamente unos veinte fotos de tupperware que está vendiendo. O un líder espiritual prehispánico de milpa alta, no el psicólogo, que sí es más o menos serio, pero este lleva semanas publicando imágenes de chistes, imágenes de inteligencia artificial de dioses prehispánicos, y lo que tiene es problema económicos y desperdicio de tiempo; los estados son su salida de un modo de vida misrable y no de dinero, sino quedarse viendo el techo sin saber porqué.

Y entonces, mis actos no son todos calculados, pero abrirse o descuidarse hacen mucho daño a la gente. Las personas más «sanas» que conozco ahorita no ligadas al camino de Mitra, personas que no han hecho pacto con la ley están por sus cuarenta y con dolor, esperando que la vida mejore, pero no luchando activamente por eso.

Despego con una segunda  nave en Eve online.

Y mientras una dama que no es analista me reporta del desastre que tienen en los monolitos, solo sonrío. Me reportaron lo mismo otras personas hoy. Hay cosas que un licenciado en sistemas normal no puede hacer. Y ahora tienen como diez cosas por hacer, complicadas, y una de ellas es el trato con las personas, ser amable. Como penúltima entrada, justamente me está buscando la dama Margarita por problemas de Office en su casa. Ni eso pueden planear los monolitos con teletrabajo. Y como siempre soy aquel al que ignoran en tiempos de paz, y buscan en la tormenta.