Hace un rato hice el pago final de la razón social. No se realmente las consecuencias del plan que se consolida el día de mañana, pero creo que ya no hay manera de tomar una decisión contraria a lo que decidí hace tantos años, que hasta el momento, veo como una de las pocas alternativas viables existentes entonces. Aunque con la experiencia he visto nuevas opciones que no pude ver a los dieciséis, el curso de acción y dirección general replanteado a principio de los veintes, sigue siendo el mas elegante y menos sujeto a interferencias externas.
Mañana se firma algo que cambia los caminos a futuro. De este fin de semana al que sigue, se deben aclarar otros puntos. Es decir, el 14 de abril en la noche estaré cansadísimo pero habiendo sacado seis sistemas de tamaño bastante grande, y habiendo creado dos razones sociales como resultado de la racha de trabajo que empezó hace casi ocho meses, a mediados de septiembre.
Mientras escribo está en segundo plano un proceso que salva el respaldo de la información de una de las tres cuentas pesadas que faltan, de la migración del viernes. Uno de los procesos que respaldé venia con una serie de adjuntos sobre cambios de razones sociales dentro del cliente principal, y datos relacionados con su nómina. Que me hicieron pensar en los acuerdos de hace años sobre Deciles y similares, con uno de los sistemas que hice para las gaseras.
En cierto sentido, las actividades que realizará la Sociedad civil y las posibilidades que abre, serán uno de mis triunfos personales. Sin embargo, hay una satisfacción mayor al saber que esa razón social, no hará nada importante hasta dentro de diez años.
Entre hoy y mañana termina el proceso de los correos. Debo alterar la documentación preliminar de la semana pasada y volver a enviarla. El lunes trataré de tener una junta con el gerente de sistemas de mi cliente principal. Hay muchas posibilidades a futuro y algo debe hacerse para “ser uno mismo una unidad”. Tres de los proyectos están detenidos y los otros espero sacarlos en el transcurso de este mes.
Por el momento , es mejor dejar de escribir y prepararme a afinar los detalles de mañana.
Hay responsabilidades demasiado grandes para un solo hombre. Solo un loco, o la persona adecuada, se enfrenta a ellas.