Las dos ultimas semanas han sido especialmente memorables en cuanto a cantidad de trabajo. Desde hace dos meses ha ido creciendo y creciendo la cantidad a manejar.

El fin de semana pasado uno de los proyecto fue un exito completo, y por lo que se ve será un ingreso seguro de unas veinte veces por año, de 200 a 300 dolares netos de ganancia cada vez. No recuerdo cuantas líneas de código pero no llegaba a 500. Estoy esperando que me lleguen en un momento los datos de otro uso de ese software. Cambiar correo aqui, cambiar correo alla, programa del evento, logotipos, y preparar otra factura. El código sigue siendo mio.

Ya se hizo el pago de la razón social que sigue, una SA, estoy a la espera que el notario me confirme el nombre. El siguiente paso en este momento depende un poco de estar a la espera e los desarrollos.

Por un lado el director general de una empresa necesita comentar si cinco proveedores son suficientes, y dar el visto bueno a unos scripts de java que hice, solo son unos 3000 renglones, pero el resultado es bastante bueno, aunque ha sido laborioso.

De momento parece que debo enfocarme en el futuro de la plataforma. Varios clientes estan requiriendo ya nube tipo amazon, pero la desidia que he visto de algunos proyectos a los que se supone estoy ayudando, me llaman la atención.

Normalmente no entro a facebook, pero uno de lo clientes tiene u grupo de discusión donde esta su personal de publicidad y de contabilidad, asi que he entrado unas dos o tres veces la ultima semana. Lo que vi hace unos años no solo de problemas de seguridad sino de falta de foco, sigue siendo vigente. De momento en estos dos meses he hecho mas por asegurar el futuro que los ultimos diez años, no pro dinero sino por cerrar definitivamente posibilidades y abrir nuevas.

El fin de semana pasado tuve que ir al interior del país a una boda relacionada con mi mamá. Como salí de la oficina con bastante sueño el viernes y mi esposa se había ido desde temprano para ver un detalle de las escrituras de la casa, decidí irme en autobús para dormir en lugar de manejando, aunque son menos de ocho horas de viaje.

El sábado me llevé la sorpresa que mi camisa se maltrató, y en pueblo quieto no habían camisas arrow de mi medida de cuello, así queme fui a Liverpool, pero no manejaban Nauticaa y solo había Givenchy, que de plano no me quedan. Así que tomamos un taxi y le pedí me llevara a una plaza comercial con cines (donde seguramente habría un men factory por lo menos). Me tuve que conformar con una camisa de 400 pesos, color gris claro con rayas finas, que era la única compra decente. El problema era que las dos corbatas que llevaba (una azul de Pardueles y una roja de Liverpool ) literalmente no combinaban.

Habiendo conocido las corbatas del desaparecido Gentry de Polanco, no me resulta fácil elegir corbata y menos con prisas. Las de scappino que estaban cerca para variar eran de sus horrendos estampados, y ni las rojas ni las azules de Men’s factory me gustaron. Tardé una hora y media en conseguir una corbata decente, que resultó ser gris a rayas negras que me costó lo mismo que la camisa.

En las compras y caminatas para conseguir lo que buscaba me di cuenta de cosas extrañas y otras que doy por hecho.

Lo de siempre. Pago la ropa, saco efectivo (para deducir de impuestos de la empresa), saco el RFC de la empresa, y veo la credencial que dice «líder de proyecto», el típico esperar uno o dos minutos extras a que le expliquen a la cajera como meter un RFC en provincia. Usar la credencial de Líder de proyecto es mas cómodo a veces que explicar a clientes con pretensiones que soy director general y que los autentificadores bancarios van en mi bolsillo.

Salimos del segundo lugar mi esposa y yo, nos quedan poco menos de cinco horas para estar en la iglesia para la boda. Como desayunamos ligero, y es poco mas de las doce del día, otra vez me disgusta estar en pueblo quieto. En la ciudad lo único decente y no de precios abusivos es el sushi, pero está del otro lado. Nos paramos en pizza hut, pedimos la meat lover con rollitos de queso (cheesy pops), pago los 240 y pido la factura.

Me pongo a pensar que parecido es estar en cualquier ciudad, y como esas 24 horas lejos del negocio no desentonan. Cuando trabajaba en las gaseras me pasaba a veces algo similar. Recuerdo las tardes de 1995 – 1997, en mis veintes. Hablando con personas que nos burlábamos de los tenían la idea que la ropa o las amistades eran mejor que el trabajo duro.

¿ Y que pasó?

De repente me encontraba casi veinte años despúes, en medio de ninguna parte, DESCANSANDO yendo a una boda a la que era obligatorio ir, y con tan mala suerte que era necesaria otra camisa.

Ha pasado el tiempo en que en las noches checaba antes de acostamre tener fahrenheit y Hugo Boss para por lo menos una semana. Los sacos y trajes los uso para reuniones con clientes y no en el trabajo diario. Ahora normalmente me despierto a las cinco y media, en lugar de pensar de lo que tenía que hacer en las computadoras del trabajo, empiezo por revisar los servidorres y si hay novedades de clientes de la empresa, checo nuevamente mi plan de entregas, uno o dos correos rápidos de avances de después de las seis de la tarde, antes de prepararme y salir.

El trabajo duro da sus frutos en tranquilidad mental. Pensaba ayer en esos 20 años que llevo cotizando en el IMSS, o en las empresas que he hecho cosas asociado a personas con sus propias empresas, o las mías propias.

Y es extraño.

Conozco varios «gerentes de sistemas» o «It – managers» que están divorciados, en proceso de divorcio o que no pueden programar aunque les vaya la vida en ello. Algunos ganan menos que yo.

oops.. apagón, sigo escribiendo después que debo apagar los servidores.

Hice 12000 líneas de código en lo que va del mes y faltan otras 3 mil por lo menos.